Coimbra. Iglesia de Santiago
La iglesia de Santiago se halla en las escaleras que bajan desde la calle Ferreira Borges, centro comercial de la ciudad, a la plaza del Comercio.
Obra fundamentalmente del siglo XII, durante el reinado de Sancho I, fue consagrada en 1206.
Ocupa el lugar de un edificio anterior del que poco sabemos.
El interior del edificio tiene tres naves y tres capillas en la cabecera. En el siglo XV se le añadió en el lado norte una capilla cuadrangular de estilo gótico con influencias mudéjares.
El techo, a dos aguas, está realizado de madera. La nave central se encuentra separada de las laterales por tres columnas a cada lado.
En la cabecera, la capilla norte, cuya forma semicircular sólo es visible por el interior, es la única que ha mantenido en parte la estructura original. Las otras fueron profundamente modificadas al ensanchar la calle en el siglo XIX.
La luz entra en el templo muy tamizada a través de un gran rosetón y de otros ventanales.
La fachada principal está coronada por una cruz griega inscrita en una circunferencia.
Lo más interesante de la iglesia son sus portadas.
Para acceder a la principal, situada a poniente, hay que subir una larga escalinata.
Sobre la portada está el rosetón mencionado con ventanales de medio punto a cada lado.
Está formada por cuatro arquivoltas de medio punto. Las arcuaciones son sencillas; ramas, flores y bolas se muestran en las más interiores. Las columnas están profusamente decoradas con relieves geometrizantes, helicoidales y motivos vegetales. Los capiteles contienen motivos vegetales y animales. Una sucesión de palmetas sigue la cornisa a ambos lados. Se considera que algunos capiteles derivan de los de la catedral como las aves enfrentadas. Las diferencias de calidad entre unos capiteles y otros hace suponer que intervinieron artistas de relieve y otros menos expertos.
La elegante portada sur, probablemente de finales del XII, está compuesta por varias arquivoltas sin decoración envueltas por una moldura esculpida con una serie continuada de pámpanos.
Los fustes de las columnas centrales alternan en su decoración las conchas de vieira alusivas a su patrón Santiago y elementos vegetales. Los demás fustes y los capiteles de las seis columnas están decorados con motivos vegetales.
Esta iglesia ha sufrido muchas modificaciones a lo largo de los siglos. La principal fue la construcción de otra iglesia encima en el siglo XVI, que fue demolida durante la reconstrucción a principios del siglo XX.